Autor: Luisa Afanador
Una mente inquieta acerca de la ciudad.
NOMBRE OBRA: Tejido Patrimonial: La Calle 5ta como corredor de conciliación y activación cívica.
ARQUITECTOS: Nueve arquitectura + Entropía + Land
FOTOGRAFÍA: Nueve arquitectura + Entropía + Land
UBICACIÓN: Cali, Colombia
AÑO: 2023
M2: 112.019.000 m2
Este es el primer artículo de la serie “suturas urbanas”. Una serie de artículos que aborda la ciudad a partir de sus bordes y límites en proyectos que llevan a cabo una función reconectara; la “operación sutura” como estrategia urbana de recomposición y reparación de acciones pasadas que han generado "cicatrices" en la ciudad dejando como consecuencia un tejido urbano fragmentado.
El concurso de Anteproyecto de Urbanismo y Paisajismo en Santiago de Cali: El Paseo de Jovita al Río, enmarcado como su nombre lo indica desde la calle 23 con el parque de los estudiantes donde se encuentra el monumento de Jovita, hasta la carrera 1 con el río Cali, y un “brazo” correspondiente a la cra 4 entre calle 5 y calle 3 oeste; conlleva interesantes reflexiones desde su planteamiento hasta la propuesta ganadora, como un proyecto de reparación que parte de los símbolos y dinámicas existentes y va planteando nuevas a su paso mientras coloniza con nuevos espacios y dinámicas para el peatón otras zonas de la ciudad menos caminadas y menos conectadas, pero si muy congestionadas por el tránsito vehicular.
La calle 5 en Cali como la conocemos hoy ha sufrido importantes transformaciones urbanas, que han generado una deuda con la ciudad. Esta vía que conecta la ciudad de norte a sur, ha sido objeto de un ensanche por el crecimiento de la ciudad en los años 70 a partir del fraccionamiento de los predios del perfil vial original dejando como resultado algunas culatas de predios en desuso, parqueaderos a nivel de calle, predios con dimensiones y proporciones poco atractivas para su desarrollo que, a pesar del paso del tiempo, aún son evidentes.
Un perfil vial característico que varía entre los 25 y 40 metros de ancho en una extensión aproximada de 1.4 kilómetros de longitud, con solo 4 puntos de cruces peatonales, hace evidente la ambigua fragmentación y cicatriz de un borde en medio de la ciudad que conecta en su sentido longitudinal, pero divide en su sentido transversal. No solamente barrios y unidades de planeación urbanas, sino que su dureza resultante del ensanche, los hundimientos, la discontinuidad del espacio público y la accesibilidad peatonal, se acentúa por las diferencias topográficas, morfológicas y de actividad predominante entre cada uno de los lados, donde el lado este se caracteriza por actividades institucionales mientras en el lado oeste predominan actividades de turismo cultural y gastronomía.
La propuesta Tejido Patrimonial: La Calle 5ta como corredor de conciliación y activación cívica, se estructura en 3 etapas: rambla del origen, alameda de las ceibas y paseo de la cultura; en 6 ejes temáticos denominados centro multifuncional, centro colaborativo, centro biodiverso, centro accesible, centro habitado y centro productivo. Entre los cuales se pueden señalar a grandes rasgos algunas de estas decisiones metodológicas y estratégicas bajo la mirada de la operación sutura:
La primera y más radical de las acciones, establecida por el concurso se desarrolla en el tramo rambla del origen cuya intervención consiste en el hundimiento vehicular de este tramo permitiendo la integración peatonal de ambos frentes urbanos entre el centro histórico de la ciudad y San Antonio, uno de los barrios tradicionales de la ciudad.
En ese mismo sentido, la estrategia general de implantación propone la integración de escenarios culturales, históricos y ambientales ubicados en su zona de influencia por un sistema de espacio público transversal y longitudinal que dinamiza ambos bordes permitiendo una convergencia hacia los nodos propuestos a lo largo de la calle 5. Todo esto integrado ambientalmente mediante corredores bióticos que ponen en valor el paisaje, el manejo del agua urbana y una ruta histórica patrimonial conformada por un sistema de señalética y mobiliario urbano que permiten enmarcar el patrimonio a través del paseo por espacios urbanos y arquitectónicos.
Para el modelo de crecimiento de este borde se apuesta por la reconfiguración de los frentes urbanos de la calle 5 mediante modelos y tipologías de ocupación que plantean el aprovechamiento de predios de oportunidad y la redensificación predio a predio mediante reciclajes arquitectónicos, englobes y la exaltación patrimonial. Todo esto teniendo en cuenta la permeabilidad y activación de los primeros pisos que garantizan una interacción directa con el espacio público y los centros de manzana.
Finalmente, pero no menos importante, se prevé la activación urbana diurna y nocturna de estos frentes integrados, mediante la peatonalización programada de vías para la extensión de los escenarios urbanos multipropósito, articulados con una agenda urbana de actividades culturales e integración de espacios productivos como medida de aprovechamiento económico y soporte para la vida pública.
Existen varios elementos de la ciudad a las que podríamos considerar cicatrices o infraestructuras de bordes intraurbanos y que alimentando bajo la visión de autores como Lynch y otros que han tratado ampliamente temas de imagen y morfología de ciudad nos puede llevar a cuestionar ¿Qué otras reflexiones, proyectos y estrategias de operación sutura podrían surgir para la ciudad sobre estos elementos de borde? y ahondar la mirada sobre la pertinencia de reconstruir sobre lo construido, habilitar conexiones y entender la ciudad como una cerámica rota y fragmentada que debe de ser tratada mediante la operación sutura como una herramienta de reparación de la ciudad actual y mitigación para la expansión de la ciudad futura.