Autor: Santiago Vejar
Arquitecto especializado en planeación urbana y OT. Escritor y fundador de ARQritic.
Las imágenes que estás a punto de ver tienen una serie de peculiaridades en común, se trata de sitios que producen una enorme desconfianza, inseguridad, claustrofobia e incluso pánico, son sitios muy parecidos a lugares reconocibles y cotidianos: oficinas, estacionamientos, sótanos, salas de espera, departamentos, ludotecas, entre otros. Estos lugares liminales fueron reinterpretados por los usuarios de internet. Hoy nos daremos la tarea de analizar a los backrooms: la arquitectura de la incomodidad.
Los “cuartos traseros” o backrooms son una serie de creepypastas (historias de terror originadas en internet) cuya finalidad es causar incomodidad en el espectador mediante la experimentación de espacios liminales, laberínticos y de interminables niveles.
Su historia se remonta a 2018, En el sitio web de 4chan un usuario pidió a la comunidad compartir imágenes que simplemente “se sintieran extrañas”. Alguien más cargo la fotografía ligeramente inclinada de una habitación con una iluminación deficiente; meses después, un usuario comentó la imagen narrando el primer creepypasta de los backrooms.
Las imágenes pueden ser renderizaciones o fotografías análogas de lugares comunes con una atmósfera profundamente incómoda e inquietante, si bien con el tiempo los usuarios agregaron a las historias monstruos y múltiples niveles, desde sus inicios esta tipología de creepypastas ha enfatizado en el control que la arquitectura y la atmósfera del espacio ejerce en el usuario. Seguramente todos en algún momento de nuestra infancia nos encontramos con un espacio liminal al que los backrooms nos hacen recordar, ya sea algún hospital, alguna escuela o estacionamiento, alguna tienda departamental, o incluso alguna vivienda en particular.
El motivo del porqué nos inquieta tanto las imágenes de este tipo de espacios se concentran en diversos factores: son sitios cerrados, con una iluminación deficiente, ausentes de contacto o referencia con el exterior y por lo tanto, desorientadores. Son lugares donde observamos el tradicional plafón reticular, muros tapizados y piso alfombrado. Las proporciones son inconfortables, los espacios son confusos, laberínticos, repetitivos, inorgánicos, en pocas palabras, inhumanos.
Hemos notado que la tipología estilística a la que alude este tipo de espacios es al llamado estilo internacional, aquel que deviene del funcionalismo y racionalismo y al que los arquitectos de la mitad del siglo XX buscaban instituir en todo el mundo. En la actualidad podemos identificar a este y sus características en edificaciones que ya de por sí son inhumanas y monótonas: edificios de oficinas con cubículos de dimensiones reducidas, vivienda en serie, edificios departamentales, centros comerciales, estaciones de metro, estacionamientos, entre otros.
El que este tipo de escenarios sean tan susceptibles de encontrarlos nos dejan una enseñanza, la arquitectura puede ser más que aterradora, puede ser incómoda cuando es fría y racional, producida sin el mínimo rasgo de la búsqueda de provocación emocional y confort, cuando se aleja al humano de su actividad básica de habitar en el mundo.
Enfrentarse a una arquitectura de este tipo produce en quien especta una experiencia estética fundada en la sensación de impropiedad y extrañeza con el espacio y la situación. Para el humano como contenido ser ajeno a su contenedor implica la retención de su voluntad. Estar delante de un espacio arquitectónico, cualquiera que este sea, es encontrarse frente a un artificio, producto de la mano humana, nada en la naturaleza hay que se le parezca. Ahora bien, si este enfatiza en ello, el espacio se apropiaba del individuo e invalidará la condición humana con su funcionalidad racional y su frialdad, será encontrarse dentro de un escenario que repele y desdignifica, donde la identidad del sujeto se vuelve quebrantable y donde en la situación que le envuelve hay nada que le muestre su valor.
¿Te has encontrado en algún sitio como este?,
¿Qué elementos identificas en ellos?
Nos gustaría saber tu opinión sobre lo que este tipo de lugares nos dicen del trabajo de la arquitectura.